domingo, 14 de febrero de 2010

LA NACION ECONOMIA.





Llegó al país de la mano de las empresas españolas que participaron de las privatizaciones de los 90 y corrió su misma suerte: auge, crisis en 2001 y, ahora, crecimiento.
Eulen es una de las principales empresas españolas (factura 1200 millones de euros, con 83.000 empleados), dedicada a dar servicios como seguridad, limpieza y mantenimiento, y hoy está entre las 54 compañías que más empleo generan en la Argentina.
"El plan fue simple: salir a captar clientes fuera de las empresas españolas", dijo Miguel Livi, director general de Eulen en la Argentina desde marzo de 2006. El primero de esos contratos, recuerda, fue con el hipermercado Wal Mart. Hoy, Eulen cuenta con 3000 personas en su planta permanente y abarca cinco unidades de negocios: mantenimiento técnico de grandes edificios, seguridad física, mantenimiento de espacios verdes, limpieza y servicios auxiliares (relevamiento de medidores de gas, corte y reconexión de servicios domiciliarios, por ejemplo).
Entre sus clientes se cuentan Nordelta, Musimundo, Techint, Kraft, Telecom, Disco, Movistar, Arcor y Pesquera Pereyra, entre otros.
Acaba de ganar tres contratos: con Edesur, Coca-Cola y Cencosud. Con Edesur es un contrato a tres años por 7,5 millones de pesos por año para realizar el mantenimiento y la limpieza de subestaciones eléctricas y edificios de la empresa. Con Cencosud se trata de un contrato de limpieza de los supermercados Vea y Disco por 2,5 millones de pesos por año, por 24 meses.
En el caso de Coca-Cola no pueden dar el monto del contrato, que es por dar mantenimiento y limpieza en su centro de distribución.
Para el contrato de Edesur, por ejemplo, traerán personal especialmente capacitado desde España, donde Eulen cumple el mismo contrato con Endesa, para que durante seis meses capacite a los locales.
"Nos está costando muchísimo encontrar gente capacitada", admitió Livi. "La gente se va al sector productivo, que hoy está en expansión."
Negociaciones
En su último ejercicio, la facturación de la filial local ascendió a 120 millones de pesos, un crecimiento del 84 por ciento con respecto a 2006, y acaban de cerrar la compra de un edificio de 2 millones de dólares para instalar sus oficinas en Palermo.
Livi espera un crecimiento del 30 por ciento para este año, gracias a la reactivación económica. "En Europa se externaliza todo y vemos que acá, a medida que se recupera la economía, es una tendencia que crece", dijo. El ejecutivo señala que el crecimiento se da en la medida en que "tercerización ya no es una mala palabra, asociada con la precariedad laboral o el conflicto gremial".
Livi, de 37 años, egresado de la UADE y con un Master of Business Administration (MBA) en el IAE, es el primer argentino al frente de la empresa, que siempre fue conducida por españoles. Le tocó no sólo el período de crecimiento, sino también el de mayor negociación para discutir los ajustes salariales, ya que dentro de su empresa tiene cuatro sindicatos: el de seguridad, el de maestranza, el de comercio y el de camioneros (este último, debido a un servicio de reparto de correos).
"El secreto es negociar con razonabilidad y criterio. Cuando de las dos partes hay intención de acordar, se llega a buen resultado", asegura, y señala que los sueldos "están definidos por el mercado".
"Es evidente que la gente tiene que cobrar más porque sube el costo de vida", reconoce, aunque en su opinión sería mejor que el Gobierno y los sindicatos negociaran una banda de ajuste y luego, en una segunda instancia, que los grandes rubros de cada sindicato negociaran los números más finos para ajustarse a la realidad económica de cada sector. "No es lo mismo el nivel de actividad de los shoppings que el de otros empleados de comercio", dice.
Respecto del alto índice de trabajo en negro, que alcanza al 39,3 por ciento según el Indec, el ejecutivo cree que disminuir esa cifra es, en gran parte, responsabilidad de los empresarios.
"Somos responsables y a la vez somos víctimas", afirmó, "ya que los que empleamos en blanco tenemos que competir con empresas que tienen menores costos por la informalidad".
Por Josefina Giglio
De la Redacción de LA NACION